Eunice, Farro, Claudia Fernández, Ghidone, Dobrich, Patricia Fierro, todas uruguayas que con y sin

Eunice, Farro, Claudia Fernández, Ghidone, Dobrich, Patricia Fierro, todas uruguayas que con y sin plumas hacen su temporada en el país vecino. El objetivo para la mayoría de ellas es ganarse un lugar de privilegio en los escenarios argentinos.


IGNACIO QUARTINO | BUENOS AIRES

Si te gustan las vedettes, bancate la purpurina" dijo Claudia Fernández, en una ocasión en que le preguntaron sobre las reglas que un pretendiente debe aceptar si intenta iniciar una relación amorosa con una chica de curvas generosas que se destaque en el teatro de revista.

Esa purpurina a la que se refiere Fernández, dista de ser solamente ese elemento que le da brillo al cuerpo de estas hermosas mujeres. En temporada de verano, también incluye horas de ensayo, escándalos en los programas de chimentos de la tarde, dos funciones diarias (de martes a domingo, generalmente) en que estas chicas no regresan a sus hogares antes de las 3 de la mañana durante los dos o tres primeros meses del año (esto último, dependiendo del éxito de la obra).

Pues bien, desde 2005 a este verano 2009, cada vez son más las uruguayas que se ponen purpurina para deslumbrar en teatros de Buenos Aires, Mar del Plata y Carlos Paz. Entre ellas, Eunice Castro, Virginia Dobrich, Claudia Fernández, Andrea Ghidone, Patricia Fierro y Mónica Farro.

Mar del Plata. Paradójicamente, Claudia Fernández, pese a ser la precursora del género revisteril en Uruguay, esta temporada decidió probar suerte como actriz en Confesiones de mujeres de 30 junto a María Fernanda Callejón y Anita Martínez, en Mar del Plata. Mal no le fue: estuvo nominada como actriz revelación en los premios Estrella de mar y, de ahora en adelante, su objetivo es casarse con Leonel Delménico, tener hijos y consolidarse como intérprete.

Sin embargo nadie, ni siquiera la propia Claudia, se animaría a afirmar que abandonó las plumas definitivamente. De hecho, Carmen Barbieri, protagonista de Vedettísima, una de las obras más taquilleras de Mar del Plata, quiere contar con Fernández como primera vedette para la revista que producirá en 2010 y que ya tiene nombre: Fantástica.

La oferta parece tentadora. Al menos, a los ojos de Andrea Ghidone que hizo su debut en las tablas argentinas este año en la revista de Barbieri.

Ghidone lleva casi tres meses instalada en Mar del Plata. Desde el 4 de diciembre, cuando se levantó el telón de la primera función, la ex vedette de Boom Magic dice vivir un sueño y, aunque la temporada se le hace un tanto extensa prefiere evitar las quejas, como acostarse a las seis de la mañana todos los días y levantarse a la una de la tarde, por lo menos para disfrutar unas horas de su hija.

"Creo que ninguna de las personas que hacen teatro en Mar del Plata conocen cómo es la vida de mañana", sostiene Ghidone y en eso coinciden la gran mayoría de las vedettes uruguayas.

"La gente piensa que estamos de veraneo y no es tan fácil como parece, porque tengo que estar a eso de las seis de la tarde en el teatro y me voy después de la medianoche, cuando vamos a cenar con el elenco. Recién ahí me voy para mi casa", explica Andrea, consciente de que este sacrificio "es parte del precio que uno paga por desarrollarse profesionalmente en lo que le gusta".

Mar del Plata es una ciudad de similares características a Montevideo. El último censo indicó que más de un millón de personas viven todo el año y en temporada abundan apartamentos y hoteles para que unos 500 mil turistas puedan pasar allí sus vacaciones.

Ese balneario argentino no tiene rambla y cuenta con muy poco lugar en la playa, porque el negocio de carpas y las sombrillas para alquilar se roban la poca arena ganada al mar. Quizás esto último sea lo que Virginia Dobrich más extrañe de Montevideo, mientras transcurre la temporada que la tiene como una de las figuras de Bendito Total, obra producida por otro uruguayo, Álvaro Navia (Waldo) y que protagoniza La Tota Santillán.

Consciente de que seguirá siendo reconocida como la soñadora de La Tota por un buen tiempo, Dobrich está agradecida por todo lo que le tocó vivir durante 2008 en ShowMatch. De hecho, gracias a ese programa, pudo sumarse al elenco de una revista en Argentina tras nueve años. "En 2000 formé parte del elenco de Boom, cuando Graciela Alfano llevó la obra a Carlos Paz. Ahora espero quedarme en Argentina. Ojalá que en invierno pueda sumarme al elenco de una obra en Buenos Aires", cuenta Dobrich, de pareja con Martín Whitencamp (soñador de Kenita Larrain en Bailando 2008).

De su experiencia en Carlos Paz a ésta que vive en Mar del Plata, Dobrich no encuentra grandes diferencias con el show off que se genera dentro y fuera de los escenarios, con las vedettes que se pelean por la tevé y los productores que no escatiman en argumentos delante de las cámaras para que les crean que su obra es la más vista.

Ajena a estos escándalos, Dobrich asegura que las peleas siempre existieron: "Me acuerdo que cuando estuve en Carlos Paz hace nueve años, ya existían disputas y vedettes que se peleaban entre sí o con sus productores", explica.

Precisamente, el día que Virginia habló con El País, la obra en la que participa había sido noticia en todos los programas de espectáculos, una vez que Cinthia Fernández fuera despedida por indisciplinada. Los productores admitieron haber invertido más de 12 mil dólares por tener a Fernández en su elenco y ahora, es Dobrich quien debe hacer los números que le correspondían a su colega.

"Las dos funciones a veces se tornan agotadoras porque tengo dos cuadros de baile (uno de ellos es en el caño), aunque por otra parte me puedo lucir más", se consuela.

Carlos Paz. Si en Mar del Plata abunda la purpurina, ¿qué puede decirse de Carlos Paz? Esta pequeña ciudad balnearia ubicada a 40 kilómetros de Córdoba capital, está cerca de tener más teatros que casas particulares. "Acá levantás una baldosa y sale un espectáculo de algo", suele repetir Flor De la Ve, una de las figuras del verano.

De la Ve es cabeza de compañía de La fiesta está en Lago, la obra más exitosa de la temporada 2009. En la misma, una conocida por los uruguayos tiene un cuadro de reggaeton que despierta suspiros en los espectadores. Se trata de Mónica Farro.

La rubia se instaló en diciembre en la ciudad cordobesa y, desde entonces, quienes siguieron los programas de chimentos como Intrusos y Los Profesionales ya saben que Mónica se peleó -y feo- con su ex marido, Enrique Ferraro, luego que este se desayunara por la prensa que la madre de su hijo salía con un productor de ShowMatch desde hacía varios meses.

Quienes siguieron esos programas de la tarde, también se enteraron que Farro y Ferraro después hablaron y acordaron iniciar los trámites de divorcio en buenos términos y que, hace una semana, el problema de Farro ahora es con su compañera de elenco, Adabel Guerrero, con quien se cruza dardos a través de los móviles televisivos.

En resumen, la vida de Mónica Farro se ha convertido en un reality. En poco más de un año, la uruguaya se convirtió en una de las vedettes de mayor prensa en Argentina, donde permanecerá por un buen tiempo.

Al menos, ya confirmó su presencia en esta obra que se mudará en abril a Buenos Aires, en el teatro Tabaris. Además, recibió llamados de Sebastián Ortega y Pol-Ka para tener un papel en la ficción. Su regreso a Uruguay -por el momento- parece inviable. "Siempre le voy a estar agradecida a los argentinos porque me abrieron las puertas para mi carrera sin problemas", recuerda Farro.

Patricia Fierro, en cambio, confirmó que el 3 de marzo está de regreso en Uruguay. La chica Playboy durante 2007 y 2008 si bien dice estar feliz de integrar el elenco de Revista Latina junto a Iliana Calabró, María Martha Serra Lima y Jessica Cirio, no se halla en el ambiente del espectáculo argentino.

"Participar en una revista es una experiencia que siempre quise vivirla. Ahora estoy rodeada de gente muy talentosa, en una compañía excelente en la que somos todos muy unidos y un equipo en el que da placer trabajar. La revista continuará en Buenos Aires, pero yo no creo que siga porque tengo otros proyectos para mi vida", explica Fierro, quien regresará en marzo a la pantalla chica, al programa Pizza a Carballo, de Canal 4. Probará suerte en el teatro, pero siempre en Uruguay. Eso sí, que conste, que propuestas para hacerse conocida en Argentina no le han faltado.

En la edición de febrero de la revista Hombre, Fierro impactó con una producción hot y el "¿quién es esa chica?" empezó a escucharse en medios argentinos por su parecido con Jessica Cirio.

Los programas de chimentos le propusieron móviles y escándalos en directo. ¿Ella? No quiere saber nada. "Para hacer eso una tiene que vivir las 24 horas con un personaje. No es bueno ni malo. Farro puede hacerlo y no tengo nada contra eso, pero siento que no es para todo el mundo. Al menos, no es para mí", explica Fierro.

Buenos Aires. Mientras todo eso ocurre en Mar del Plata y Carlos Paz, en Buenos Aires, otra uruguaya disfruta de ser partícipe de uno de los éxitos del verano en calle Corrientes con Varieté para Maria Helena (producida por Gerardo Sofovich). Se trata de Eunice Castro quién superó las expectativas de la crítica especializada.

La morocha comenzó el verano con un perfil más bajo que en tiempos de Bailando, hasta que blanqueó su romance con Alejandro Balbi, hasta el momento la pareja del año en la incipiente farándula local. Como muestra basta un botón: la última edición de Caras Uruguay con Eunice en tapa hablando de su nueva historia amorosa fue récord de ventas de esta publicación.

Con la popularidad de la morocha como aliada, la producción de Varieté resolvió llevar este espectáculo a Montevideo en abril junto a Aníbal Pachano y Marixa Balli.

"La gente piensa que estamos de veraneo pero no es tan fácil como parece. Es agotador".

"No se hacen amigos en este ambiente"
Salvo peleas puntuales entre compañeras de elenco, las vedettes uruguayas que hacen sus primeras armas en la revista argentina hablan maravillas de sus compañeros pero aclaran que fuera del escenario no hay posibilidad de hacerse amigos. Sólo hay competencia y compañeros de trabajo. Dicho de otra manera, ninguna se anima a poner las manos en el fuego por alguna colega. Lo peor: están alertas de lo que una u otra pueda decir de ellas, porque pueden hundirlas, con tal de tener un rato más en un móvil en directo.

"Los escándalos pueden servirte para hacerte conocida. Claro, te pueden herir mucho si no sabés que todas están en la misma que vos. No hay compañerismo en este ambiente y lo importante es saber hacer bien tu trabajo sobre el escenario. Si sos un desastre nadie te puede contratar", cuenta una de las vedettes.

A veces hay excepciones. Virginia Dobrich, por ejemplo, alquiló departamento en Mar del Plata con Virginia Gallardo (soñadora de Daniel Agostini) y comparten el mismo elenco. No han tenido fisuras en la convivencia y Virginia cree que, cuando realice un balance de su primera temporada en Mar del Plata, le habrá quedado una amiga.

El resto de las uruguayas, se refugian en la familia. Ghidone, Fierro y Farro son mamás. Además de trabajar para estar siempre divinas, viven pendientes de sus hijos. Andrea está con su beba de dos años y medio desde que llegó a Mar del Plata y todas las semanas recibe a un familiar para que cuide a su hija. Mónica y Patricia, con hijos pre adolescentes, recibieron visitas de ellos semana por medio. Dicen extrañarlos como locas. Las dos, con cierto sentimiento de culpa, cuentan que sus hijos las apoyan porque las ven felices. Por estos días, Farro está aún mejor: Diego (13 años) llega a Carlos Paz para celebrar su cumpleaños.