PARTIDO INDEPENDIENTE

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publicado en ANALISIS POLITICO |
Antes del lanzamiento de la candidatura a la presidencia de Pablo Mieres, que se realizó el 7 de este mes de diciembre 2008, la Convención Nacional del Partido Independiente aprobó 8 documentos programáticos


En el entendido de que hay que “invertir en la infancia”, para los independientes “urge contar con una política de licencias maternales y paternales para el primer año de vida de los hijos y con regímenes de licencias especiales en casos de enfermedad de los hijos e hijas, tanto en hombres como en mujeres”.

Según la propuesta, esta medida también apuntaría a “conciliar el mundo productivo [de la mujer] con el reproductivo”, para abrir “la corresponsabilidad de género en la crianza de los hijos [porque] ésta es una tarea de las mujeres y de los hombres” y disminuir las “tensiones entre el cuidado de los niños y el desarrollo personal y profesional de las mujeres”.

“Debemos asegurar a los padres que unos meses con sus hijos no equivalen a perder sus empleos y por tanto empobrecerse.

[…] Podemos preguntarnos si es posible hacer esto en términos de costos, pero esto es una cuestión de prioridades”, se sostiene en el documento.

El presidente Tabaré Vázquez es de los que creen que la licencia para padres “constituye un derecho del primer mundo”. Esas palabras constan en la exposición de motivos de un proyecto de ley -con iniciativa del Ejecutivo y aprobado este mes en el Parlamentoque permite a las trabajadoras públicas y privadas laborar medio horario durante seis meses cuando adopten hijos menores de edad.

La propuesta del PI en la materia está incluida en el documento “Integración social”, que postula también la flexibilización del acceso a la vivienda para los jóvenes y, al abogar por que se ponga freno a las corporaciones en los Consejos de Salarios, recomienda “saber priorizar y saber decir no, para un mejor sí”. “Para los partidos liberales [los Consejos] son un ámbito para asegurar la maximización de beneficios de parte de los empresarios con el menor daño posible a los trabajadores.

Para los partidos de izquierda, son un ámbito [donde] obtener el mayor provecho de parte de los trabajadores para reducir ‘plusvalía’.

Sin embargo, estos espacios pueden ser muy ricos en el modo de brindar beneficios no salariales a los trabajadores, como la conciliación de la vida familiar con la laboral”, afirma.

Gestión Ceibal Para la reforma de la gestión pública, el PI promueve “el gobierno electrónico”. “El fortalecimiento de los sistemas de procesamiento y análisis digital […] permitirá obtener información confiable y oportuna, desterrando lo que hoy es una nebulosa que esconde todo y [en la que] todo se vuelve ‘relativo’”, se asevera, añadiendo que los conceptos de centralización y descentralización cambian “sustancialmente cuando se está en una administración o en un gobierno digitalizado”, y que “estas innovaciones, si se logran aplicar, generan cambios culturales, pero se necesita de acuerdos políticos”.

También se subraya la necesidad de crear un sistema de evaluación de calidad de la gestión pública obligatorio y periódico, apuntando que “existe una tendencia internacional al uso de certificaciones de calidad o de eficacia sobre todo tipo de variables, tanto se trate de países como de organizaciones públicas y privadas (gobierno corporativo, responsabilidad social, calidad de la gestión, calidad total) o de sistemas (sistema educativo, sistema de salud)”. “Estas evaluaciones son muy valoradas y muy temidas. Generan un saludable estrés institucional y todos se preocupan por mejorar y no quedar en evidencia”, opina el PI.

Estimado TLC Se cuestiona el Plan de Emergencia de la actual administración y se manifiesta apoyo a un Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) “que sea un auxiliar eficiente de los efectos distributivos principales: la generación de gran número de empleos bien remunerados y el gasto social correctamente orientado y ejecutado”.

“En su versión actual, el IRPF es un cúmulo de errores causados por los del diseño adoptado y consolidados por la soberbia del equipo económico que se negó a escuchar”, reza el documento “Macroeconomía”.

Como medidas transitorias por la crisis, el PI propone dejar que suba la cotización real del dólar, reducir al mínimo la inversión pública “por unos pocos años” y gravar las ganancias ligadas a aquellos bienes que son rentables con el tipo de cambio actual (carne, lana, cueros, maíz, arroz o soja).

De todos modos no se propone, como lo hacen otros sectores, derogar el IRPF, y tampoco la Ley de Educación, a la cual también se plantean duras críticas.

En materia de inserción internacional, los independientes consideran que “el Frente Amplio ha caído en contradicciones; se han enviado mensajes confusos a nuestros amigos y principales socios comerciales; se han desperdiciado valiosas oportunidades y se ha estado ausente allí donde era fundamental marcar presencia” y más adelante explicitan: “Uruguay debe enfrentar el problema adicional de no haber firmado un TLC [Tratado de Libre Comercio] con los clientes actuales y potenciales de sus productos de exportación, mientras que sus competidores de América Latina y Oceanía sí lo han hecho”.

Agregan que el Mercosur “debería proveer al Uruguay unas ventajas realmente extraordinarias para que nuestro país renuncie al 98% del comercio mundial y acepte privilegiar las posibilidades que ofrece el 2%”.

El PI ve la instalación de una planta nuclear como solución de mediano plazo a la crisis energética, pero registra que eso está prohibido por el artículo 27 de la ley 16.832 (de junio de 1997), norma que el Partido Nacional insiste en derogar cuanto antes.

En lo referido a seguridad pública, propone una reforma de la Ley Orgánica de la Policía porque “se basa en un concepto de fuerza militarizada que no resulta adecuado para el buen cumplimiento de las tareas” de esa fuerza, así como la creación de más cárceles. Los documentos programáticos no incluyen políticas específicas en materia de derechos humanos.

Los liderados por Mieres apoyan la concesión de la segunda terminal de contenedores en el puerto de Montevideo y prometen, en el área de transporte, cuidar “los procedimientos de gestión a fin de no cometer los errores que este gobierno tuvo en la asociación de PLUNA con el consorcio Leadgate”.

El diputado Iván Posada ya lo dijo en la proclamación de la candidatura de Mieres: el PI no competirá en la carrera electoral para ganar la presidencia. En uno de sus documentos programáticos, los independientes aseguran que aplicarán sus propuestas “a cualquier acuerdo político que le permita avanzar, por sí mismo o en conjunto con otras fuerzas políticas, lo más directamente posible en este rumbo”.

Lourdes Rodríguez