Supervielle

Supervielle en un desenchufe a medias en la Zavala Muniz
Acústico. Hoy y el 18 inaugura el ciclo "Mov"


SEBASTIÁN AUYANET

El plan intimista de la Zavala Muniz le sirve a Supervielle para animarse a otra relectura de su disco solista, editado hace casi un lustro. Con varios Bajofondo y otros invitados, arranca el ciclo "Mov" que organiza allí junto a Juan Campodónico.

Seguir presentando un disco que tiene casi cinco años de vida es una quimera para cualquiera. Pero la circunstancia -es decir, el ciclo de conciertos experimentales Mov- le exigía a Luciano Supervielle un concierto con su material solista.

"Se juntaron un montón de proyectos", dice Supervielle antes de atacar un pancho en la Ciudad Vieja. Eso también suena repetido. Entre giras con Bajofondo por todo el mundo y las producciones con el equipo de Juan Campodónico en el que se desempeña como arreglador y asistente, más la composición de la banda sonora para una película sobre Artigas dirigida por César Charlone, queda poco tiempo para la composición propia. Aquí confluyó el ciclo con los primeros intentos por componer un disco de piano solo.


"Vengo componiendo hace meses, es un proyecto que recién está en sus inicios: música para piano con video. Cuando empecé con eso, Gerardo Grieco nos invita a armar el ciclo. Entonces se pidió que empezáramos con un concierto mío. La presentación del disco ya se tocó muchas veces -la última en Montevideo fue durante la Voxpop 2007- entonces había que hacer algo distinto".

Así, el proyecto de piano solo trajo la idea de llevar al acústico a viejas canciones y probar algunas nuevas en formato acústico y con artistas no vinculados a Bajofondo. "Para mí, ahí arrancó otro proyecto porque quiero que esto se convierta en un disco en vivo", explica Supervielle. Algunos incorporados son Martín Ibarburu y Gustavo "Topo" Antuña, guitarrista de Buenos Muchachos y nuevo incorporado a los ensayos del Cuarteto de Nos.

Dentro de la sala de ensayo, la idea del cruce de estilos que persigue el colectivo se trasladó a las incorporaciones. "Eso no es difícil porque con Bajofondo es la forma que tenemos de trabajar. Sumar gente, que aporten lo suyo y darle distintas lecturas a nuestra música. En los últimos toques de este disco, cuando fuimos a Brasil, nos cruzamos en el escenario con Vitor Ramil, con Paulinho (Moska)... Creo que el espíritu de estos conciertos también tiene inquietudes muy afines con lo que en el mundo hacen bandas como The Whitest Boy Alive, que reinterpretan música electrónica con instrumentos convencionales: una batería, un bajo, una guitarra. Me gustaría que esto venga por ahí".

Para inquietos. Sobre "Mov", Supervielle explica que es una iniciativa en la que se buscan cruces similares entre músicos. "Acá coexisten mucho varios géneros y ámbitos musicales. Es difícil tener una escena sustentada por un género propio. No se puede hacer un ciclo de un sólo género. Pero sí hay una tendencia general a mezclarse que está buena. Acá, los artistas buscan cada vez más absorber información y la tendencia de afuera pero manteniendo un sonido original y más propio de este lugar. Mirá el hip hop. Con el rock también está pasando algo parecido. Queremos que sigan saliendo cosas así".

Las ideas para la mezcla son, cuando menos, llamativas y ninguna posibilidad se descarta. Desde La Mufa unida en un concierto con Gabriel Peluffo, de Buitres hasta una presentación del dúo joven de folclore Chamangá. "Nos gustaría que sea un lugar bien experimental donde se le dé lugar a nodos emergentes. También queremos traer manifestaciones puras que sean contemporáneas o unir a Franny Glass con Fernando Cabrera... un músico muy influenciado por otro, pero de otra generación".

Los cruces van hasta con los invitados: para la primera fecha de "Supervielle acústico" irá como invitado Brian Mackern, y para la segunda el ex Astroboy Martín Rivero con sus nuevas canciones.

La vida sobre un avión
Bajofondo habrá cerrado el año pasado de forma oficial su gira "Mardulce", pero sigue tocando. Al colectivo le espera un mes por Europa y una gira por EE.UU. en septiembre, una plaza que se le abrió al grupo a partir de su presentación en Coachella -el festival más importante del año musical pop y rock en ese país- y la edición "anglo" con el sello Decca. "Hicimos varios sold-outs para públicos entre 300 y 1000 personas. Así que ahora nos toca de nuevo la película de girar en un bus por allá, es increíble".


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