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"ATRACTIVOS CULTURALES y TURÍSTICOS"

El fuego que es de todos: Cada 17 de octubre en la Colonia Piamontesa de La Paz se conmemora la fundación del primer asentamiento de inmigrantes valdenses en Uruguay.
Desde 1958, año del centenario de la fundación del poblado, los festejos adoptaron una forma más precisa.
Al entrar la noche, los habitantes de la Paz y otros venidos de zonas cercanas, especialmente de Colonia Valdense, recorren el pueblo antorcha en mano.
Al final del recorrido, todas las antorchas se unen en una gran fogata que puede verse desde todos los rincones de la villa.
Los participantes aseguran que el fuego simboliza el progreso, y por ello la llama de uno se junta con la de otros.
Gran fogata: Se realiza en la parte más alta de la ciudad entre la Iglesia Valdense (la primera de América del Sur) y el tanque de OSE.
Alrededor del fuego se entonan canciones tradicionales de origen italiano y otras típicas locales, como muestra de la integración cultural de los valdenses en Uruguay.

Colonia La Paz: Nombre propuesto por Doroteo García, integrante del directorio de la Sociedad Agrícola del Rosario Oriental, que compró los campos ocupados en 1858 por los valdenses.
Cada familia de colonos obtuvo por contrato una extensión de 36 cuadras de campo.
Al concluir el contrato, el campo quedó en manos del usufructuario.

Cultura granjera:
"En la esquina de Convención, un apretado grupo de gente rodea un puesto que parece ser el que más marchantazgo reúne.
Véndese allí productos de la Colonia Suiza: queso, manteca, huevos, tocino, jamones y los vendedores no se dan tiempo para atender a los numerosos pedidos que hacen, teniendo rara vez que rectificar el peso, tan acostumbrado están ya a calcularlo".
Este texto periodístico de 1883 sobre la feria de los domingos de Colonia Suiza, es testimonio del arraigo de la producción artesanal de quesos y dulces, así como de vinos, en todo el departamento.
La cultura granjera está profundamente metida en el alma de los habitantes de Colonia.

La ciudad de los muros pintados:
Por iniciativa de Yens Schou, un maestro y promotor turístico de Rosario, desde setiembre de 1998 los muros de esa ciudad comenzaron a tomar color para contar historias.
Así se originó el "primer museo uruguayo de arte mural de carácter histórico".
Los murales se realizaron con fondos reunidos por los habitantes de la ciudad con el apoyo de algunas empresas nacionales, organizaciones no gubernamentales y la Intendencia Municipal de Colonia.
En su ejecución participaron varios artistas uruguayos y vecinos de Rosario.
Los muros recuerdan hechos históricos o populares, como "las corridas de toros" que tuvieron lugar en la ciudad hasta 1883, u homenajean a personajes locales, como "El Tente".

"El Tente": Sobrenombre de Alfredo Zulueta, un deportista que a fines de la década de 1930 renunció a la victoria en una maratón de Buenos Aires para sostener a un rival desfalleciente, y abandonó su carrera futbolística en Nacional de Montevideo para regresar a su ciudad.



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"Atractivos Turísticos"
Industria turística:

Cerca del 7% de los turistas que ingresan a Uruguay eligen el departamento de Colonia para su estadía.
La oferta de servicios turísticos se concentra fundamentalmente en la capital, Colonia del Sacramento, y está constituida por hoteles medianos y pequeños.
Otros polos de atracción son la estancia presidencial Anchorena, los hoteles de Colonia Suiza y diversos establecimientos de turismo rural.



Las condiciones para un desarrollo más pronunciado de la industria turística están dados por la existencia de un aeropuerto, terminales portuarias, puerto deportivo y buenas conexiones con Argentina, país del que proviene la mayor parte de los visitantes.
En los últimos 10 años el número de turistas que ingresaron al departamento se multiplicó por 15 (173.600 personas en 1997).

Playas balnearias: Las más destacadas son Santa Ana, Artilleros y El Ensueño (cuyas entradas están ubicadas entre los kms 152 y 155 de la ruta 1), y Fomento, Britópolis, los Pinos y Blancarena (se arriba por un camino asfaltado desde el km 117 de la ruta 1).



Puertos: Los principales puertos fluviales son los de Nueva Palmira, Colonia del Sacramento (terminal de pasajeros) y en menor medida, Juan Lacaze (abastecimiento de combustible a planta ANCAP).
Las terminales turísticas más importantes son los atracaderos de yates de Carmelo y Riachuelo y el de Colonia.

"La calle de los suspiros"
La "calle de los suspiros" de Colonia del Sacramento, antes llamada Ansina, es un símbolo de la ciudad fortificada, plasmado en las telas de innumerables artistas.
Pavimentada con piedras en forma de cuña y un desagüe central, se caracteriza por los colores vivos de las casas que la enmarcan.
La antigüedad de sus construcciones en barro y piedra cubiertas de tejas, y su angostura, hacen de esta "calle de los suspiros", que muere casi en la muralla reconstruida cerca de la puerta de Campo, un rincón íntimo del Barrio Histórico.




La Estancia de Juan Narbona:
Este establecimiento situado en la desembocadura del arroyo Las Víboras en el río Uruguay, fue propiedad de Juan Narbona, juez comisionado del gobernador de Montevideo Bruno Mauricio de Zabala.
Comenzó a ser explotado como calera en 1732.
En 1738 fueron construidos un oratorio y una capilla que se convirtieron en los únicos entre Montevideo y la Villa de Soriano.
El casco de la estancia es una sucesión de habitaciones dispuestas de este a oeste, con ventanas mirando al sur y puertas hacia el norte.
El centro del edificio es una torre de tres pisos cuyas paredes alcanzan en la base dos metros de espesor.
Tras la reforma artiguista la estancia tuvo varios dueños.
Se la conoce también como estancia de Camacho, yerno de uno de los antiguos propietarios.

Capilla: Actualmente, además de derruidas paredes, el templo conserva una imagen de la Virgen de la Candelaria, al costado del altar.
El casco de la estancia fue declarado Monumento Histórico Nacional.

Bruno Mauricio de Zabala: De Zabala (1682-1736), un noble español nacido en Durango, Vizcaya, peleó en Gibraltar (1704) y en Lérida (1707).
Designado mariscal, como premio se le concedió el gobierno del Río de la Plata.
Debido a la insistencia del rey Felipe V fundó Montevideo en 1726.
El aventurero Anchorena:
El excéntrico Aarón de Anchorena quedó deslumbrado por el territorio ubicado en la desembocadura del río San Juan, cuando cruzó en el globo "Pampero" el Río de la Plata en 1907, junto al aviador argentino Jorge Newbery.
Adquirió allí 11.000 hectáreas de campo y transformó una parte en parque natural.
De sus viajes por el mundo trajo 150 plantas exóticas que conviven con 50 especies nativas, en un área protegida de 1.370 hectáreas poblada por ciervos axis originarios de India, jabalíes, carpinchos, zorros de monte y nutrias.
Desde la torre de 75 metros que levantó para observar el paisaje, en los días claros pueden verse los mayores edificios de Buenos Aires.

Parque natural: Por exigencia del propio Anchorena, el parque y la casa de estilo inglés en la que vivió hasta su muerte pasaron a manos del Estado uruguayo para ser utilizadas como residencia de descanso del presidente de la República.
Donde nace el Plata:
Desde los altos de la Punta Gorda puede verse la desembocadura del río Uruguay en el Río de la Plata.
Se llega a Punta Gorda por un camino de bitumen que sale del km 267 de la ruta 21.
Desde la pirámide de Solís, construida en homenaje al navegante español Juan Díaz de Solís, muerto por los nativos en estos parajes, se desciende por la escalera de Darwin hasta la playa.
El científico inglés Charles Darwin recogió muestras estratigráficas y botánicas en las barrancas de Punta Gorda en 1833, durante su viaje alrededor del mundo en el buque "Beagle", al mando del capitán Fitz Roy.
Este mirador privilegiado es también un lugar único para observar el atardecer.

Altos de la Punta Gorda: Entre los arbustos de la parte superior de las barrancas, Fructuoso Rivera instaló la batería desde la que sus hombres controlaban el paso de los navíos enemigos durante la Guerra Grande (1843-1851).
Real de San Carlos:
El Real de San Carlos, 4 km al norte del casco viejo de Colonia del Sacramento, es uno de los emblemas de la ciudad.
En esta zona, donde en 1761 se instaló el virrey Pedro de Ceballos para sitiar a la Colonia portuguesa (de ahí su nombre: "campos del rey" Carlos III), se edificó a principios de este siglo un importante complejo turístico.
La sociedad dirigida por el empresario argentino Nicolás Mihanovich apostó a la llegada de turistas argentinos al muelle instalado, y construyó un frontón de pelota (cesta punta vasca), una plaza de toros y un casino que funcionó hasta 1917. Actualmente la plaza de toros, que sólo operó durante cuatro años (hasta 1912), es de acceso restringido y está en proceso de reciclaje.

Complejo turístico: Un tren de trocha angosta transportaba a los turistas desde el muelle hasta el hotel.
Hace tres lustros un temporal dañó severamente el muelle.

La plaza de toros, de estilo morisco con estructura de hierro, es la única que sobrevive en Uruguay.
José Batlle y Ordóñez, presidente uruguayo entre 1903-1907 y 1911-1915, un líder de poderosa personalidad, prohibió las corridas de toros en el país.
Santa Ana y Artilleros:
Santa Ana y Artilleros (con acceso directo desde la ruta 1 a la altura del km 155), son dos de los muchos balnearios establecidos en Colonia a lo largo de las costas del Río de la Plata.
Santa Ana fue fundada por los hermanos Greising en 1946.
Plantaron más de medio millón de árboles de distintas especies, con predominio de eucaliptus y pinos, que le dan un tono peculiar.
La tranquilidad de este balneario, que cuenta con buenas instalaciones para camping, contrasta con el movimiento que le caracterizó en otros tiempos, durante la conquista española, cuando existía allí una guardia de artillería.
Ambos balnearios son de fácil acceso y tienen buena infraestructura de servicios (hosterías, restaurantes y servicios de salud).
Uno de los paseos más interesantes para realizar en Santa Ana y Artilleros es caminar por los senderos forestados con acacias, eucaliptus, pinos, araucarias, anachuitas, ceibos, robles, sauces, tipas y abetos.

Fuente: La información sobre historia, arte, cultura y atractivos turísticos fueron estractadas de material bibliográfico de TODO URUGUAY (Publicación en CD de EL OBSERVADOR), obra declarada de Interés Cultural por el Ministerio de Educación y Cultura.



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Director y Redactor Responsable: Javier Meneses Silva
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URUGUAY
Año 2008